domingo, 4 de junio de 2017

Aventura Serums 1

(de Whatsapp)
Tenía que salir a las 3:30 para poder chapar carro. Justo cuando estaba por cerrar la puerta de la posta llegó una familia entera. Mientras los atendía empezó a llover, con truenos y todo. Mi plan era acabar y caminar hasta la municipalidad, porque ahí si puedo chapar carro, pero por la lluvia me quedé bajo techo con la familia.
Eramos 3 resfriados, dos señoras, y yo.
Salía cada vez que escuchaba un carro; los que iban en sentido alejándose de Tingo (que podían llevar a la familia a su comunidad) estaban llenos, y ningún carro pasaba en dirección a mi hogar. Solo pasó una mototaxi sin gasolina. Terminé empapado.
De suerte pasó un carro con frutas al que se podían subir los pacientes y luego embalada una Hilux con 1 espacio a la que me subí yo.
Estoy empapado, en una pickup con una familia de 5, todos con sobrepeso llevando plátanos en la tolba. Me quité zapatos y medias, y tengo frío.
Moraleja:
Traer a la posta poncho y botas, y un abrigo.
Y chiflar es un skill que me ha salvado la la vida varias veces
(Faltaba dejar en claro que la ambientación de la escena es gracias a un riko huayno)


jueves, 4 de agosto de 2016

#MusicLog Marzo16 Abril16 Mayo16 Junio16 Julio16

Estuve marzo, abril, y mayo en Huaral, y luego rotando en cirugía un poco ocupado. Pero el registro de música es muy importante, así que así me pongo al día

Descubrimientos (en dos grupos, porque fueron en dos etapas separadas)
Huaral
The Jezabels - Pleasure Drive; durante todos los viajes en carro a la posta o al hospital, esta fue la canción de Huaral
Radiohead -  A Moon Shaped Pool; en especial Present Tense (la escuchaba por lo menos una vez al día). Era lo que necesitaba
The Last Shadow Puppets - Aviation; finísimo
Frank Ocean - Super Rich Kids; Ese teclado lo es todo, y el segundo coro es exquisito
America - Ventura Highway
Millones de Colores - MDC vs El Fuego
Holy White Hounds - Switchblade
Kendrick Lamar - untitled 06 06.30.2014; canta Cee-Lo!!
M83 - Do It, Try It
Cirugía
Chance The Rapper - Coloring Book; todo el mixtape, en especial Blessings (las dos) (hay dos canciones que se llaman "Blessings" en el mismo album), Angels, y All Night
Band Of Horses - Casual Party; la canción de cirugía
Bear Hands - 2AM
Red Hot Chili Peppers - Dark Necessities; qué tal bajo csm
Joywave - Destruction; es ese tipo de canciones raras que son bravazas
Iggy Pop - Sunday
Jamie xx - Loud Places (ft. Romy); digna progresión del primer disco de The xx
Tears For Fears - Head Over Heels; la saqué del soundtrack de Donnie Darko, temón
Drake - One Dance
Porcupine Tree - Blackest Eyes; ese contraste entre un riff durísimo y un verso suave es excelente (y el baterista es uno de los mejores de la época)


ReDescubrimientos
Sade - Never As Good As The First Time
Gustavo Cerati - Karaoke
People In Planes - If You Talk To Much (My Head Will Explode)
Incubus - Summer Romance (Anti-Gravity Love Song)
Hall & Oates - I Can't Go For That (No Can Do)
Keane - Can't Stop Now

Y me pareció que esto de registrar las canciones por periodo era aún mejor de lo que pensé porque terminaré el año con un playlist del año! Ya lo estoy haciendo y lo comparto;

domingo, 6 de marzo de 2016

Hay un grillo que canta en el baño de la emergencia

miércoles, 2 de marzo de 2016

#MusicLog Febrero16

Descubrimientos:
Madvillainy - Madvillain; Discazo de Hip Hop
Kanye West - The Life of Pablo; Cada vez está más loco, y me está empezando a molestar que las canciones parezcan borradores, pero tiene unos temones. Mis favoritos luego de las primeras escuchadas son Ultra Light Beams (We don´t want no devils in the house) y Highlights
Complexion (A Zulu Love) - Kendrick Lamar; no me había dado cuenta de que esta canción era tan fina
Chon - Grow; Disco de rock progresivo melódico. Buena recomendación. En especial Perfect Pillow
Fizzy Blood - I'm No Good; Rock fresco del puro y duro
Beyoncé - Formation; Qué bestia

ReDescubrimientos:
Adele - Rumour has it
Gnarls Barkley - Crazy
The Beatles - Drive my Car
Tame Impala - The Less I Know The Better
Woodkid - Iron (Gucci Vump Remix)
Silversun Pickups - Nightlight y Cannibal

martes, 2 de febrero de 2016

#MusicLog Enero16

Hay mucha música y muy poco tiempo, y como hay mucha música es fácil olvidarse de parte de ella. Por eso voy a empezar a registrar lo más representativo de cada mes de mi vida:

Descubrimientos:
Frank Ocean - channel ORANGE (Álbum); especialmente Sweet Life, Monks, Lost, y Crack Rock
theSHIFT - Dreams
The Last Shadow Puppets - Bad Habits (2016)
Submarino - Henry Kissinger

ReDescubrimientos:
Dream Theater - Home
No Doubt - Don't Speak
The Last Shadow Puppets - My Mistakes Were Made For You
Kanye West - Flashing Lights
Los Lagartos - Any Day
Santana - Smooth
Plug Plug - Autodestrucción, Summer Boy, Año Nuevo

domingo, 10 de enero de 2016

El Programador


¿Nunca se han cuestionado por qué a veces las cosas que encontramos a nuestro alrededor no tienen sentido?¿ Que ese edificio no tiene por qué tener una puerta en la fachada del tercer piso? ¿Que esa persona definitivamente no debería estar ahí? ¿Que por qué diablos se ha vestido tan mal? ¿Por qué hay zancudos en mi cuarto en pleno invierno? ¿Nunca les han pasado cosas así?

A mí si. He visto escenas muy raras. Como cuando, caminando por una zona de San Isidro que no conozco, aparece un pequeño local con una pequeña puerta verde cuya entrada es en desnivel, unos tres escalones más abajo.  Fijándome bien veo que  venden útiles escolares y sacan fotocopias; sobre esta misma tienda se extiende un altillo, y sobre este veo dos sillas de peluquero antiguas frente a un espejo que ocupa toda la pared. Una librería y una peluquería compartían un mismo espacio, mínimo, chiquitito. O como que, mientras caminaba alrededor del Golf, se detiene frente a mí una camioneta negra de lunas polarizadas y me puse muy nervioso, pensando que iba a ser inminentemente secuestrado al paso, considerando que es una zona donde esto es común,hasta que vi, desde unos 3 metros de distancia, un gran sticker de Hello Kitty del tamaño de mi laptop, pegado sobre la guantera.

Hello Kitty

Les digo la verdad. Esas cosas no deberían estar ahí, o no deberían ser así. Son errores.

Errores del Programador.

La verdad es que existe un individuo sentado en un escritorio, en un cuartito chiquito sin ventanas ni adornos, con la luz apagada y la pantalla de una iMac iluminándole la cara y reflejando en sus anteojos, con una taza de café frío y un cenicero lleno de colillas de Pall Mall, tipeando en código C++ el mundo virtual que yo estoy viviendo. Él es El Programador. No sé si será humano, si será un alien, si será un dios, o Adán el primer hombre. Tampoco sé si solo me tiene asignado a mí, o si también programa la realidad de otras personas. No sé si trabaja para un jefe. Quizás son miles de programadores, uno para cada uno de nosotros, o uno para cada casa, calle, o ciudad, o quizás es uno solo el que programa lo que todos vivimos (en cuyo caso sí sería -en la práctica- un dios que comete errores).

En nuestra ciudad hay lugares que conocemos, en los cuales habitamos, y lugares que no conocemos; todos los días, cada vez que entramos a un lugar previamente inexplorado, tenemos al redactor escribiendo nuevo código. Me lo imagino tipeando como loco, a la velocidad de la luz, cada hoja de cada árbol y cada gota en cada una de estas cada vez que damos la vuelta en un sendero selvático previamente desconocido. Ahora, si consideras la cantidad de texto que tiene que escribir para codificar una escena así, con tanto detalle, resulta un poco improbable. En la práctica, al diseñar lugares nuevos para nosotros, tira un par de planos de colores, un par de elementos resaltantes para que capten nuestra atención, y listo. Cada hoja de cada árbol de ese paisaje selvático que te hipnotizó no tiene una gota de lluvia; sólo tienen gotas las que te llamaron la atención (él aprovecha a la perfección el modelo de filtro de atención de Broadbent). Intenten recordar las cosas que estaban en el último escritorio que has visto. Probablemente recuerden dónde estaba el escritorio y de quien era, pero difícilmente vas a poder enumerar cada cosa en su superficie. Mientras más tiempo estamos en un lugar, él va completando su obra maestra, creando nuevos elementos para jalarnos el ojo, y de esa manera en nuestras mentes se completa la escena. Es por eso es que conocemos con tanto detalle nuestro hábitat natural (los cuadros de la sala, los árboles de tu cuadra, los huecos en la pista), pero solo superficialmente los lugares que son nuevos para nosotros; conocemos nuestro entorno a profundidad, en parte porque lo observamos todos los días, pero sobre todo porque cada vez El Programador le va sumando más detalles a su trabajo. Nunca deja de trabajar para llevar su obra a la perfección.

Y lo que pasa es que a veces noto ciertos glitches en la vida cotidiana; quizás en ese momento el redactor tipeó algo mal, o se le crasheo la computadora, o se le derramó el café frío sobre el frágil teclado Apple. Quizás pegó el código que correspondía en el archivo de otro de sus asignados en el mío, o se olvidó de algún ">" o ")" y se jodió todo. (Si diseñar en código una página web es complicado, imagínense el trámite que debe representar la construcción de un mundo 3D en HD).

Por esos errores es que me di cuenta de todo esto, y por esos errores es que les estoy escribiendo. Quiero que lean, entiendan, y dejen de ignorar. Es como en las películas de los hermanos Wachowski, sólo que acá no somos nosotros los que decidimos poder volar o rebotar en el suelo luego de una caída de 50 pisos. Los que deciden las propiedades el mundo real son ellos. Probablemente el mareo y malestar generado por el consumo excesivo de alcohol no sea por el alcohol en sí, sino por El Programador jugando con los parámetros de gravedad y balance de nuestra realidad.

Pero, ahora que me pongo a pensar, ya nada tiene sentido; si vivo en un mundo virtual, ¿alguien más comparte el mundo conmigo? Son ustedes lectores humanos que viven en las mismas condiciones que yo, o estoy escribiendo esto para el entretenimiento de mi Redactor asignado. Para ti. Tú planteaste esos errores para que yo los viera. ¿Programas lo de afuera, o también lo de adentro? ¿Sólo mi casa, mi pueblo, mi trabajo, mis amigos, mi familia, o también mi cuerpo? Cada pelo, cada resfriado, cada cicatriz. ¿Sólo lo que siente mi cuerpo, o acaso también lo que siente mi mente? ¿Estoy pensando lo que quieres que piense?

Lima, 2012-2016

jueves, 14 de mayo de 2015

lunes, 18 de agosto de 2014

Constelación

Solo yo
Que hay tres lunares en tu rostro
Que se alinean como una constelacion,  
Que tienes una cicatriz bajo la nariz
Que la desalinea, igual que a la mía, y
Que hay una marca secreta en tu cuerpo
Que hice yo, con amor, sin querer.
Solo yo

martes, 24 de junio de 2014

Sprite al polo

Teníamos que llegar a la casa de esos señores japoneses que me contactaron hace masomenos un mes. La hija mayor, la señorita Sumiko, fue mi contacto. Llevábamos ya como 3 horas en la camioneta, sudando gotas del tamaño de los arándanos de las plantas que íbamos a venderles, con bosque seco a un lado y bosque seco al otro, maleza por ahí, maleza por allá, y uno que otro majestuoso algarrobo que hacía de mancha verde en un paisaje prácticamente marrón. Increíble como de un momento a otro estas tierras se están llenando de plantaciones. A mi lado, en el asiento del copiloto, el ingeniero Horna, leyendo el tercero de los 5 periódicos que había comprado para el viaje. Atrás, dormido a pesar del calcinante calor, el ingeniero Bueno, a quien acabábamos de recoger de Chepén. El sol quemaba mis manos despiadadamente y evaporaba los hilos de saliva que caían por el cachete del dormilón del asiento de atrás.

El ingeniero Horna es un hombre de unos 75 años, muy culto, que lee en cantidades industriales y es melómano desde antes de poder caminar. Siempre sube al carro con discos diferentes. Hoy tocó uno de Edith Piaf y uno de una música árabe alucinante. Siempre tiene algo apropiado que decir. “En las Yakuzas del antiguo Japón”, me dijo, “el jefe no habla”. Yo no sabía en qué nos estábamos metiendo.

Luego de 5 horas de viaje el tramo cambió, pasamos una reja, y vi a lo lejos la construcción que supuestamente debía ser nuestro destino. Llamé a Sumiko por celular y salió a recibirnos; típica mujer japonesa de piel intacta que no te mira de frente a los ojos. Nos dijo que los otros todavía estaban por llegar, y que si queríamos podíamos ir a dar un paseo por el fundo.

* * *

Luego de recorrer 15 hectáreas de cultivos de uva Red Globe, de haber visto todo el despliegue de tecnología y de dinero que estos señores habían invertido en tremendo proyecto, y de haber sudado probablemente el 20% de toda nuestra volemia, regresamos para ser recibidos por Sumiko y una botella de Sprite al polo. Dios santo, la gaseosa helada es una de las mejores cosas de la vida. Sumiko llamó a quien parecía ser su hermano, y él se presentó diciendo que se llamaba Shigeru, pero que podíamos decirle Julio. “Ingeniero Maldonado, vamos de una vez a oír su propuesta”, me dijo, y a continuación caminamos por un espacio abierto que parecía un comedor, y nos hizo pasar a la sala de reuniones.

Y bueno, la sala de reuniones todavía no estaba lista. Estaba al centro del campamento, que por ser un campamento de trabajo, estaba conformado por unidades que siempre cumplían más de un propósito. Este era el cuarto más grande de todo el fundo. Al entrar Sumiko estaba retirando cerca de 15 camas de tatami que estaban aún organizadas en hileras en todo el cuarto; aparentemente toda la familia dormía ahí, como si estuvieran en tiempos de guerra. Ese mismo espacio servía como sala de reuniones cuando era necesario, sala de mando de todo el sistema eléctrico del terreno (había una caja de fusibles gigante a la que me daba miedo acercarme), y para mi sorpresa, estaba construido alrededor del pozo de agua que alimentaba a toda la plantación; parte del piso de la habitación era la tapa, de la cual salían dos tubos de gran calibre que corrían en línea recta por el centro de la habitación y atravesaban la pared. Resulta que en lugares áridos como este, lo más preciado es el agua (aunque para sea mí la gaseosa). Dejamos nuestras cosas y poco a poco fueron entrando los miembros del clan.

En 2 minutos el cuarto se llenó de gente. Parados frente a mí –que me sentía como Aureliano  Buendía al comienzo de la novela– estaban unos 15 Japoneses, todos con ropas viejas y sucias por el trabajo de campo, serios, como robots. Impávidos. Mientras empezaba a hablar, uno a uno fueron prendiendo sus cigarros, y a lo largo de toda la charla, que duro un poco más de 2 horas de puro floro sobre la calidad de las plantas que nosotros vendemos y las ventajas de comprarnos a nosotros, ninguno dejó de fumar; eran la más viva definición de la palabra chainsmoker. Sólo dos no lo hacían activamente: Sumiko, que supongo entendía los riesgos y quería cuidar sus 25 años de juventud, y un señor llamado Saíto, el que se veía más viejo de todos los del grupo, aunque en verdad sólo estaba demacrado por tantos años de fumar que resultaron en el enfisema pulmonar  que lo hacía toser cada cierto tiempo y que evidentemente ahora no quería exacerbar.  Todos parados, inmóviles, con sus cigarros colgando del borde de sus labios y una nube gris que empezaba justo sobre la cabeza del más alto, que creo era Shigeru alias Julio. Felizmente el viento alejaba la nube de mí, pues creo que mi bobo no la habría soportado. Las colillas colgaban de los cigarros que colgaban de sus bocas como las uvas cuelgan de las millones de hileras de ramos que crecían allá afuera, en un desierto en medio de la nada (aunque creo el término más exacto es “Bosque seco”), transformado en un oasis por el esfuerzo de familias como ésta.

Y desde que llegamos hasta este momento yo no sabía cuál era el jefe; para poder dirigir mi poder de venta debo saber quién es el jefe. Durante mi charla, los únicos que hablaban además de mi persona eran Sumiko y Julio. Los demás no decían ni pito, a las justas me miraban, y el viejo Saito tosía con una tos de perro que se escuchaba hasta el centro de los plantíos, espantando a todos los pájaros que intentaban –sin éxito– comerse las uvas. (Parte del despliegue de capital incluía una malla anti-aves que cubría íntegras las 15 hectáreas de plantaciones). Había una tía que parecía un típico sensei de película de artes marciales, sólo que sin bigote y sin la sonrisa. Los demás solo asentían, y asentían tan seguido que yo no sabía si estaban asintiendo o si me estaban saludando repetidas veces.

10 minutos antes de que termine de hablar, uno de los señores, el que estaba vestido con la ropa más vieja de todos, se paró, cogió una escoba que estaba apoyada en una esquina, y se puso a barrer. Yo no sabía qué estaba pasando, pero seguí hablando. Shigeru aka Julio me hizo algunas preguntas acerca de por qué plantar arándanos era más rentable que plantar uvas y que cuánto se demoran las plantas en empezar a dar frutos, y las cifras y las estadísticas que les traje los dejaron bien contentos, a él y a los demás, pero ningún otro dijo una palabra. Para este entonces calculaba que cada uno debía haberse terminado mínimo 1 cajetilla, pero nunca los vi cambiar de cigarro; nunca los vi prender otro.

Terminé y salimos a visitar el fundo de al lado, a ver el del jefe. Me dijeron que tenía algo de 50 hectáreas que eran sólo de su propiedad. Ante la carepalazo de los señores, no sabía si iban a comprarnos o si nos iban a mandar de regreso a Trujillo. En eso un gato se me acercó y empezó a ronronearme en la pierna.

“Aaaah gato sabe, gato sabe,” dijo el señor que había estado barriendo, con una voz grave de japonés que está masticando el castellano.

“Es que yo también tengo gato.”

“Gato pituco, lo traje de La Molina. Sólo come comida cara”

“Bueno, yo recién estoy aprendiendo a tratar a los gatos, pero son alucinantes”


Y fue entonces cuando el señor dijo lo más alucinante que había escuchado en buen tiempo: “El gato busca a su amo; tú no elijes ser amo del gato”. Me quedé pensando. Me sirvió otro vaso de Sprite helada y me dijo: “Tome que debe estar sediento, hace calor ahí adentro. El auto ya está esperando; tome y vayamos a ver mis tierras”.

Lima, Abril 2014

Zanahorias


Franca estaba recién aprendiendo a leer, pero ya se había leído como 1/5 de la colección de Todo Mafalda. Y le encantaba Mafalda. Y quería ser como ella. No tan inquisidora, pero si inteligente y perspicaz y al mismo tiempo inocente. Con un poquito del maternalismo de Susanita, pero en principio como Mafalda.

Entonces, cuando su mamá o su papá le servían la comida, como a Mafalda no le gustaba la sopa, Franca quería copiar también eso. El problema es que sí le gustaba la sopa (especialmente la que hacía su abuela). Pero no la ensalada. Por ende, cada almuerzo era un martirio para sus padres o su hermano o su abuela o quien sea que le fuese a dar la comida porque no se quería comer la ensalada. Y la jornada terminaba durando por lo menos dos horas mientras se comía, poco a poco, cada pedazo de zanahoria o pepino o beterraga. (Con el choclo no hacía problema porque amaba el ceviche).

Su hermano mayor tenía ya unos 15 años en esa época, y a veces tenía la ardua tarea de darle de comer a su hermana, especialmente los fines de semana. Entonces, entre que él estaba apurado para acabar su tarea e irse con sus amigos y ella no comía la ensalada y la hacía larga como la Historia del Gallo Capón, tuvo que ideárselas para lograr que su hermana termine rápido el plato.

Intentó chantajearla con dulces y decirle que le regalaría más muñecas en su cumpleaños, pero nada funcionó. Incluso una vez mezcló las verduras con el guiso o el arroz para que pasen caleta, pero ella era inteligente y se dio cuenta.   

Todo fue un martirio hasta que un día su hermana le preguntó algo sobre rayos X que había leído en una de sus tiras favoritas, y a él se le ocurrió una genial idea.

Las zanahorias tienen mucha Vitamina A, la vitamina para los ojos. Si te comes 10 zanahorias seguidas tendrás visión de Rayos X por 10 segundos.

Y ese fue el día en que la relación de Franca con las verduras crudas cambió por completo. Inicialmente sólo comía zanahoria y sus padres, al darse cuenta de eso, empezaron a hacer mucha ensalada de zanahoria rayada con cantidades pequeñas de las otras verduras, que poco a poco fueron incrementando hasta llegar a las proporciones normales. Se comía la zanahoria volando, y al no ver el resultado esperado le decía a su hermano, quien respondía que se había demorado mucho, y así la próxima vez ella comía un poquitito más rápido. Luego él le dijo que la zanahoria necesitaba de sus otras amigas para que la Vitamina A funcione, y ella poco a poco fue agarrándole el gusto a la lechuga, el tomate, y el rabanito (aunque nunca le gustó la palta).

Y bueno, como era de esperarse, Franca nunca tuvo visión de Rayos X, ni nada por el estilo, pero siempre tuvo la habilidad de mirar adentro de las personas y notar como eran verdaderamente, y hasta ahora sigue pensando que fue gracias a las zanahorias. 

Lima, Junio 2014

jueves, 22 de mayo de 2014

Piyamas

Entonces, en este mundo las personas viven en piyama. Cada vez que nace un bebe, sus padres lo visten inmediatamente en piyamas blancas, y les pegan las mangas de arriba y de abajo a sus muñecas y tobillos con células madre de sus cordones umbilicales. Y viven así, en piyama, hasta el fin de sus vidas.

Unas piyamas bien chéveres las suyas; crecen con ellos, se ensanchan si engordan, se encojen si adelgazan, se limpian solas -porque sino no sería el mundo de las piyamas, sino el mundo de los cochinasos-, y, sobre todo, cambian de color.

Y estos cambios de color no son extemporaneos ni aleatorios; son a drede y especialmente peculiares por una detalle: cambian de color dependiendo de la personalidad del usuario, y de como cambia desde su infancia hasta su madurez adulta.

Se pueden imaginar un mundo donde las personas usan piyama todo el día, y las personas alegres y buenas tienen piyamas de colores alegres y bonitos, y las personas amargadas y malas tienen piyamas de colores amargos y feos. Y no sólo caminan por ahí con sus piyamas de colores, sino se agrupan, se aglomeran, en bloques de colores similares, pues a las personas buenas les gusta estar con más personas buenas, y, en este mundo, ¿qué mejor manera de asegurarse de que estás con quien quieres estar que mirando los colores de sus piyamas?

Ahora, los colores dependen de la personalidad y no del caracter, pues el caracter es hereditario, y mucho más divertido -y útil- es clasificar a las personas por su forma de ser, que por su patrimonio.

Entonces, en un sitio público como una cafetería, puedes ver en la esquina a las piyamas más oscuras planeando sus siguientes fechorias, y a las piyamas más alegres riendo y disfrutando de la vida piyamezca -la naturaleza de su etnia les facilita la vida-. En la cola de la comida todas las personas evitan a la señora que sirve con piyama color caca y prefieren mil veces a la que tiene piyama blanca con puntitos rojos, como la ropa de la negrita del comercial ese de mazamorra.

Lima, Septiembre 2010

sábado, 14 de diciembre de 2013

Las Hormigas

Hace poco más de 20 años empezaron a pasar cosas raras en mi edificio. Había terminado con mi enamorada y dormía solo en el departamento. Cuando bajaba en las mañanas noté que ese olor a estacionamiento que odio tanto se había vuelto un poco más denso, como si pintara las paredes y formara una cáscara fétida sobre mi cara. 

Días después empecé a encontrarme hormigas en todas partes. Al lavarme los dientes siempre había una en el mango de mi cepillo, esperándome sobre el lavabo del baño. A veces también veía una que otra acurrucada entre mis medias limpias, luego de sacarlas del segundo cajón. Mis ojeras había crecido y emulaban el color de mis nuevas amigas. 

Me dijo el portero que mi ex suegra me había venido a buscar varias veces, pero ella sabía que yo me iba al trabajo temprano y regresaba muy tarde. 

Cuando el aire del estacionamiento se volvió más líquido que sólido y empecé a ver hormigas subir por la pared de la sala, el portero se vio obligado a buscar una causa. Esa noche me contó que al buscar en la basura encontró lo que tomó por grandes pedazos de carne podrida que algún vecino millonario decidió desperdiciar. No le pareció extraño porque el edificio estaba lleno de anormales. No volví a tener noticias de mi ex.

A la mañana siguiente mi carro no prendió. Al regresar a mi edificio no encontré portero dormido al cual despertar con el timbre. Entré con mi llave y una vez en el ascensor miré para abajo para encontrarme con cuatro hormigas en fila junto a mi zapato derecho, mirando hacia la puerta ansiosas. 

Dos días después el aire del estacionamiento era prácticamente un bloque de cera. Al volver en la noche me detuvieron en la puerta encañonándome tres policias. Uno de los niños del edificio había abierto una de las bolsas de basura; encontró una cabeza humana despellejada y sin dientes, y se desmayó. Sus padres llamaron a la policía. No pudieron reconocer el cadáver porque estaba seccionado en las articulaciones mayores y perfectamente disecado, pero vieron varias filas de hormigas negras que avanzaban y desaparecían por debajo de la puerta de mi departamento. 

Salgo de la cárcel en 5 años. Me dijeron que tenían un cuartito para mí solito en el Larco Herrera y que al salir iría ahí. No recuerdo por qué; creo que me estoy volviendo loco.

Lima, Abril 2013

domingo, 21 de abril de 2013

Presentación de revista

Él habla de
ritmo y flujo
en poesía
y yo pienso
en corazón

jueves, 11 de abril de 2013

Ejercicio literario

Mirada fija
Sonrisa seria
Mirada seria
Sonrisa fija

miércoles, 17 de octubre de 2012

La Comida Peruana

Un poema que hizo uno de mis alumnos; está en 6to de primaria.


La comida peruana,
Lo que cocina mi paisana.
Es rica y saludable,
Y la gente es muy amable.

Yo se que la ganas a la comida Francesa,
Y a cualquier Arroz con Milanesa.
Tu protagonista, el Cebiche,
Es muy rico en brujas de Cachiche.

No nos olvidemos del Arroz con Pato,
Y de que en Chicha hacen seco de gato.
Qué buena es la comida de mi Perú,
Si a alguien le falta probarla, ese eres tú.

- Paul Dubois

jueves, 11 de octubre de 2012

Primavera

Árbol de espuma de mar.
Labios de coral dulce.
Días con tono mitral,
Presagio de noches azules.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Estaba con ella en mi cama. Salí del cuarto y la dejé por un momento, y al volver encontré a mi perro ocupando mi lugar a su lado, recibiendo sus caricias, y sentí un cruce de orgullo y celos que nunca antes había sentido.

sábado, 1 de septiembre de 2012

Lomo Fino

Bueno pues,
Le pregunté a mi tío qué estaba comiendo. Me dijo que era pan con carne. Regresó a la cocina, abrió la refrigeradora y sacó un plástico del supermercado con dos pedazos de carne. Agarró uno de los dos (el más grande), se acercó al lavadero, y todavía sujetándolo en la mano izquierda, lo cortó con un cuchillo. Se cortó la mano un poquito, por lo que dejó el pedazo de carne en la sartén, que ya tenía aceite y luego prendió.
Yo le puse la sal, y cuando encontré la pimienta se la puse también. Nunca me imaginé que la pimienta podría estar guardada alejada de la sal.
Sacó un poco de fideos de la refri y me preguntó si los quería con rocoto o con salsa Ragú. Le dije que qué rico, que salsa Ragú. Puso los fideos en un plato y la salsa esparcida encima en tres manchas, y de fresa al microondas.

Qué rico está este bistec, le dije. Me dijo que no era bistec, sino Lomo Fino. Le dije que qué rico estaba ese Lomo Fino, así crudo nomás. Y me dijo "claro, a la inglesa".

domingo, 6 de mayo de 2012

Mayo

Camino a mi casa
 y unos tengo 20 años,
pero parezco un niño escolar
con mi mochila llena de libros,
sólo que ahora si me gustan;
libros para leer
y libros para aprender:
Tantas Veces Pedro,
dos de fisiología
y uno de anatomía;
y en una semana cumplo 21.

Quiero llegar a mi casa y
pasear a mi perro;
mirarlo arquearse y saltar como liebre
mientras grita y defiende su paseo
del vozarrón intimidante
de ese anciano pastor alemán rumiante
de la azotea de una casa verde.
Chicho ya tiene 3 años de perro;
21 años de humano.
Es como yo.

Sabes que estás viejo
cuando empiezas a medir el peligro.

lunes, 16 de abril de 2012

Esa cara 
de como si te metieran
una cebolla
por el culo
por dos (x2)
por 4 (x4)
por ese 2 porciento de la población total
(x [población total] x 2%)

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