Hoy estaba con Alina viendo una película; The Zodiac mató a un taxista, entonces le dije "porque mata al taxista si los taxistas son chéveres; que lo maten por marica".
Luego, en la tarde tomé un taxi para llevar mi batería de regreso del estudio a mi jato. Era carero pero la regateada funcionó de algo y conseguí un precio razonable; los demás Chobis me ayudaron a subir todo al carro y emprendimos rumbo a mi domicilio. El semáforo y el tráfico terminaron por estacionarnos frente a un local en República de Panamá (para los que no sabian el municipio pretende cambiarle de nombre a Av. Roosevelt pero nadie le hace caso desde hace tiempo) donde venden un plato de salchipapas magnánimo a cinco lucas. Y así empezó la conversación clásica (a 3 cuadras del estudio).
"La vez pasada vine con mis patas a eso de las 2, nos sirvieron dos salchipapas enormes, y cuando le pedimos más ají, agarró el de la mesa del costado (que todavía tenía los platos sucios de las personas que la había dejado momentos atrás) y lo trajo a la nuestra. Entonces yo le dije que cómo va a hacer eso si era ají usado, y me respondió "no te preocupes, ese ají esta virginal". "
"JAJAJAJAJ, VIRGINAL; taque chistoso, la gente siempre tiene salida para todo. Te la barajó linda", me respondió el taxista.
Seguimos hablando de lo "virginal" del ají hasta que apareció una anfitriona repartiendo volantes en una esquina.
Y le dije, "ta que esa si no está virginal".
Y me respondió "claro, esa está bien empaquetada, le quitas el lompa y se descuelga todo. Yo estoy feliz con mi señora de cuarentaicinco años; ta que tiene cuerpo de Barbie.
"Nosotros fuimos enamorados hace treinta años, y yo tengo cincuenta. Tanto así que fuí a la fiesta de promoción con ella, solo que ella se caso con un huevón y yo con un par de cojudas. He estado diez años, y un día, así en una fiesta de mi barrio, me la encontré, y desde ese día hacemos todo lo que no hicimos hace años."
Y después de un rato:
"Ta que yo tiro como chibolo".
"Felicitaciones. Y Gracias", le dije, y le di la mano (porque me ayudó a bajar todo y me dió un buen servicio, con historia incluida).
Los taxistas son la voz. Ahora rianse del resto de la humanidad.